lunes, 17 de abril de 2023

El Cardenal Vicario de Roma Mons. de Donatis celebra una Eucaristía en Albania con Mons. Angelo Massafra

El Cardenal Angelo de Donatis, vicario del Papa para la diócesis de Roma, visitó en la octava pascual la diócesis Arquidiócesis Católica Romana de Shkodër-Pult en Albania, donde estuvo acompañado de varios obispos y numerosos presbíteros, entre ellos el ordinario de la propia diócesis, Mons. Angelo Massafra, italiano pero de ascendencia Arbëreshë propia de la región albanesa donde es Obispo. Celebraron la Eucaristía en una de las parroquias más importantes de la diócesis con la presencia de numerosos hermanos del Camino Neocatecumenal.


viernes, 14 de abril de 2023

La Vigilia Pascual en las comunidades neocatecumenales: Un paradigma celebrativo

Anuncio del Kerigma como distintivo de una pastoral misionera y evangelizadora; Catecumenado como camino de Iniciación Cristiana; Bautismo y renovación de las promesas bautismales como término del itinerario de Iniciación Cristiana con Adultos y de los procesos catecumenales; experiencia eclesial en pequeñas comunidades como dimensión constitutiva para poder vivir la fe; Vigilia Pascual como fuente y culmen, corazón de la existencia cristiana y axis de todo el Camino Neocatecumenal; Año Litúrgico como itinerario espiritual de formación permanente; Eucaristía celebrada en pequeña comunidad eclesial para construir la Iglesia como Cuerpo de Cristo (PO, nº 6), son realidades que en las Comunidades Neocatecumenales aparecieron ya germinalmente en el origen de su nacimiento en las barracas de Palomeras Altas del Madrid de los años sesenta. 

En efecto, fue en Palomeras donde la incipiente comunidad que allí había surgido celebrará por vez primera la Vigilia Pascual. Así lo explicaba Kiko Argüello, en 1992, a los obispos latinoamericanos al rememorar estos años de búsqueda y ensayo de una Liturgia viva enraizada en el Misterio Pascual: “Ya en las barracas, hicimos la Vigilia Pascual porque en la parroquia hacían una Misa cortita y le dijimos al párroco si podíamos estar toda la noche. Me acuerdo que en las barracas salíamos al amanecer cantando Resucitó después de haber bautizado a tres o cuatro churumbeles; todos llenos de alegría, cantábamos el Resucitó al alba, salíamos por aquellos barrios de Palomeras”.