El Obispo de Lecce Mons. Michele Seccia celebra la Eucaristía con las comunidades neocatecumenales

La Eucaristía se celebró el martes por la tarde en el salón del centro social de Via Vecchia Carmiano en Lecce, presidida por el arzobispo Michele Seccia con las comunidades neocatecumenales de la diócesis. Más de trescientos niños, jóvenes, matrimonios y personas mayores, estuvieron presentes acompañados por el equipo itinerante de Salento, Rino y Cristina Petruzzelli, Don Alessandro Giglio y Alessandro Trudu. También estuvieron los presbíteros don Fernando Doria, párroco de San Vincenzo de Paoli, en cuya parroquia hay cinco comunidades neocatecumenales. El padre Carmine Madalese, párroco de Santa Maria dell'Idria, que desde hace algunos años forma junto con el equipo de catequistas una comunidad neocatecumenal de su parroquia. El padre Tomas, vicepárroco de Idria. Don Egidio Buttazzo, párroco de Sant'Antonio di Padova en San Cesario de Lecce con una comunidad Neocatecumenal. Y nuevamente, el sacerdote formado en el seminario misionero Redemptoris Mater de Medellín, en Colombia, Don Michele Benvenuto, junto al seminarista del seminario misionero Redemptoris Mater de Bangalore en India, Cesare Focchi, que ayudan a la evangelización en Salento.

Antes del inicio de la celebración, Don Fernando Doria entregó al arzobispo una mitra, diseñada por Sor Agata Loche de la Congregación de las Discípulas del Divino Maestro, y un báculo pastoral en palo de rosa de Madagascar diseñado y realizado por Don Fernando.

La Eucaristía fue un regalo de Dios para revitalizar el espíritu de los hermanos presentes, gracias a la realeza con que fue preparada por el servicio litúrgico, por la profundidad de las lecturas, la homilía, por el enriquecimiento de los cantos, las moniciones y las resonancias de los hermanos.

La homilía del obispo comenzó con un concepto muy querido por el prelado: la importancia de recibir una Palabra durante la celebración y el riesgo de que, en cambio, ésta se reduzca a un resumen genérico. Recibir una Palabra significa, continuó Seccia, que ésta se haga carne en la vida de las personas. De hecho, a través de la Palabra, es Dios mismo quien se manifiesta e ilumina las existencias, creando una intimidad personal con Él.

Finalmente, el arzobispo, volviéndose hacia los hermanos, dijo: "Quería decirles una palabra: ¡Gracias! gracias por el espíritu con el que vivís este camino de fe a pesar de los obstáculos que encontráis. Que vuestra perseverancia sea fermento espiritual de oración y de vida íntima para toda la diócesis de Lecce, deseosa como estáis de un diálogo abierto a la luz de la Palabra de Dios, para que seáis una reserva de tesoro para la diócesis, una reserva de fe en vuestras familias."

Después de la Eucaristía el obispo se detuvo para tener un momento de convivencia con todos los presentes, cenando con ellos para conocer mejor a los hermanos,a escuchar la gracia que el Señor está haciendo en las familias y también el sufrimiento de algunas personas en el trabajo, en la escuela o en la familia. Al finalizar, todos los niños cantaron y amenizaron la cena llevando al obispo un obsequio de parte de todas las comunidades Neocatecumenales de Salento.

Fuente: https://www.portalecce.it/index.php/piazza-duomo-diocesi-di-lecce/dagli-uffici-della-curia-diocesi-di-lecce/18844-comunita-neocatecumenali-della-diocesi-eucarestia-e-agape-fraterna-con-l-arcivescovo-seccia?fbclid=IwY2xjawHHrEhleHRuA2FlbQIxMQABHeY98UlP6atLPpFPfYLLh1tZt2H2i-YRfJu1LRUO2XDLa706KBZbHA_FyA_aem_YG9FuL6N3FRhbSV5JD_OvQ